Mi querida adulta/o pero peque por dentro, se que al mundo le hace falta padres que les enseñen a querer lo nuestro, principalmente a que empiecen por quererse a si mismos, y les enseñen a sus hijos a quererse y aceptar su origen y condición con mucho orgullo, para luego amar lo que les rodea, a este mundo les hace falta padres que siembren valores, familias que sepan de AMOR.
Deberían dejarles a ustedes hijas e hijos un legado importante, que no puedan apartarlo de sus vidas, la herencia que por generaciones vienen cargando tus padres por tus abuelos, quizá no puedo haber sido la mejor, ni perfecta, mucho menos la indicada, pero aprende de lo bueno y desecha lo malo, para que la cadena de acciones negativas no sigan en tu vida, ni en tu futuro, ni en tu familia.
Grábate bien esto: la familia que crece unida por encima de todas las tormentas, formarà buenos hombres y buenas mujeres, puede progresar y salir adelante, con todo y contra todo, es esa familia unida que le enseña principios, la GRATITUD de sus hijos, que cuidan a sus padres cuando envejecen.
Enmarco ejemplos de lo que en algunos casos, fue el padre o la madre, quienes faltaron en la vida de sus hijos, no es excusa, pero está comprobado que parte de esa carencia o abandono, son finalmente lo que son.
1- La ausencia de una madre en el hogar: la inconstancia de la madre que abandona su hogar y a sus hijos, sin dedicarles tiempo y sin conocerles, ese ejemplo desmoraliza y pierde valores de una mujer entregada y de familia, el símbolo de una madre que protege sus polluelos de cualquier depredador queda quebrantado y roto, por la carencia de este afecto, ¿te imaginas lo que esto provoca desde la niñez?.
2- Está el caso de un padre que abandona. no cumple su rol como pilar, cabeza y jefe del hogar, faltando al ejemplo de responsabilidad, fuerza y valentía hacia sus hijos, la carencia de esta figura paterna sin amor y ánimo, impacta profundamente la vida de los hijo/as, en especial en la vida de un hijo hombre, es fundamental, lo dicen los psicólogos, es clave para el desarrollo de su personalidad y seguridad, tal es el la falta de validez y valentía ante la vida, porque desde la niñez esa ausencia de fuerza y rigor, no la obtuvo como enseñanza de su principal progenitor, esto le permite ante el mundo ser una persona que se refugia en sí misma, insegura y sin una personalidad absoluta, por ir buscando siempre la aprobación.
En resumidas cuentas, no hay familia perfecta, pero sin duda eres fruto del amor, que eso no te quepa duda, por que no fuiste pensado por tus padres, sino por Dios, lo que quiere decir, que ya estabas en los planes divinos, ya estabas diseñada y diseñado para enfrentarte a este mundo, aunque no tengas la familia perfecta, quizá sea distante, o quizá una familia desunida.
Corta esa cadena de maldición que vive agobiando las familias por generaciones, pues no sigas ese camino y si tienes tu propia familia, activa la fuerza de voluntad en hábitos de calidad para tu familia, comunícate con tu esposo/a antes de dormir, abraza o regàlale la frase de buenas noches y buenos días a tus hijos, ayúdales con las tareas.
A fin de conocer y conectarte mejor con ellos, mejora sus actitudes y fortalece su autoestima, esto se reflejará en la calidad de aprendizaje y armonía de cada uno en casa, educación y trabajo, dediquen un tiempo de convivencias y de anécdotas de su infancia, por muy difícil que haya sido, que se conviertan en lecciones y esfuerzos de vida, que han ido superado, para enseñarles el valor de lo que se tiene ahora.
Existe una complicidad bonita desde la niñez dentro de la familia, que implica la presencia de una familia unida, los primos, primas, tías, tíos que cuidan a los suyos con apego, la sabiduría de los abuelos y abuelas que nunca abandonan, la fraternidad de los hermanos y hermanas que no se pueden separar, por más que se agarren de las mechas (cabello) es familia y a la familia se perdona.
Que tu legado sea de mucho trabajo y responsabilidad, no sufras intentando lograr ser una familia perfecta, por que nunca la habrá, no vayas en contra de tu propia naturaleza, sólo mejórala, no te apartes de la labor tan dura de mantener una familia unida, pero tampoco descuides tu felicidad, para que quienes te rodean sean felices contigo.
Vive la vida junto a quienes han permanecido a tu lado a pesar de tus sombras mas oscuras del alma, a pesar de tus defectos, de tus errores, a pesar de que has perdonado y han seguido ahí, contigo, luchando, tratando de rescatar un hogar o fortaleciéndolo; pero claro, nada es tan fácil, pues las bases firmes siempre tienen que estar en Dios para que prospere. Que sean tus virtudes las que siempre te dejen hacer una marca, donde quiera que pongas tu presencia.
Comentarios
Publicar un comentario