¡Que van a decir!

¿Evitas ser tu misma/o, dejas de aplicar tus dones a la vida, por lo que la gente dice de ti?.

Existen innumerables formas en las vas reuniendo tus propias armas de defensa, has aprendido de varias lecciones al paso de tu vida por ésta esfera, se trata de aprender siempre, por lo que se te permite y por lo que no y quisieras; pues así como a todos, no siempre tenemos lo que anhelamos, pero tenemos lo que necesitamos y aprendemos a vivir con eso.

Pero hay excepciones, cuando eres una persona ambiciosa y luchas contra el destino para mover las piezas y obtener lo que visualizas en tu mente, pues no descansas hasta ganártelo, muy bien por ti, pero no para otros. Hemos sido dictadores en algún momento de nuestra vida, también hemos sido victimas de dictadores, cuando respondemos ante los estímulos de las personas, diciéndonos que hagamos algo de lo que ellos quieren o desean ver en nosotros, que sigamos las cosas así y asa tal cual un protocolo.

Nos critican por que escuchamos cierto tipo de música, entonces somos lo que ellos quieran atribuirte y a veces lo aceptas, un ejemplo sería, que si preferimos lo clásico somos anticuados, pero se pone peor, en el momento que actuamos por nosotros mismos de forma segura, aquí ellos siempre estarán dispuestos a decirnos “cómo vivir”, en caso que, nos vean desorientados, por que claro suponen cómo debemos ser. 

En psicología se menciona que la gente que vive al tanto de la vida de otras personas y no de la propia, vive bajo catarsis de frustración, queriendo que el mundo sea lo que ellos no son, lo que no alcanzaron a ser, quieren admirar lo que no tienen, quieren querer algo o que alguien los quiera, por que no se quieren así mismos, ellos, los mismos que critican al presidente, que critican al los que están gobernando un país, a los que quieren cambiar el mundo, pero no comprenden que el mundo es y son, todas las personas a las que ellos quieren arreglar.

El mundo los incluye a ellos, no somos una atmósfera, estamos dentro, pero nosotros la formamos, le damos vida y tenemos un hábitat que se llama tierra. Entonces mi pregunta es siempre, ¿no necesitas una pausa?. En estos momentos donde hemos aprendido a que el mundo (nosotros) debemos estar más unidos que nunca, estar preparados para asumir con fe el presente y quiero hacer mucho énfasis en la fe, por que la fe no nos quita el dolor, no nos salva de la desdicha, pero la fe si nos ayuda a llevar nuestra carga.

Así que aprende a que la gente siempre tendrá algo que decir, preocúpate si no, entonces no estarías haciendo nada bien. Dice un escritor y gran orador: “sacrificar un don o un talento en esta vida por miedo a ser criticado o juzgado, es una rotunda insolencia y te aseguro que al final de la vida no habrá forma de borrar “el hubiera”.  La gente te perdona todo, menos el éxito”.

-(Daniel Habif).

Así que aprende a seguir “siendo” con “s”, la gente de ti siempre tendrá algo que decir, no dejes de “ser” hoy en día, casi nadie lo es, sonríe cuando te esté yendo mal y cuando te vaya bien, sonríe, eso hace la fe, nos ayuda a sonreír aún con nudos en la garganta, las palabras vengan a ser solo una palanca de motivación, para salir de ese confort tan estresante del que dirán.